Esa es la pregunta que más escucho cuando cuento que en las últimas semanas me ha dado por ir solo al cine y posiblemente ahora mismo te lo estés preguntando tú también, ¿este chico no tiene amigos?
Parece ser que últimamente ir al cine es un acto social de reunirse con los amigos (eso quien va) en vez de sentarse tranquilamente a ver una película, que sí, que también me daba un poco de cosa ir al cine solo pero chic@, qué quieres que te diga, estaba un poco harto de quedarme con ganas de ver películas que se estrenan porque nadie quiere acompañarme, o porque no cuadramos horarios (que conmigo es complicado, para qué nos vamos a engañar) o porque no querían gastar dinero hasta que me planté y dije: vamos a ver, tengo la tarjeta de Cinesa (que por cierto, es gratuita) con la que tengo descuentos y no me sale tan caro (porque sí amigos, la entrada de cine te hace sangrar un poco hasta el punto que a veces hasta te sale más rentable comprarte el DVD/BR cuando salga), ¿por qué no voy a poder ir a ver una película que tengo ganas de ver aunque vaya solo? Y así estoy haciendo.
De momento llevo tres películas vistas con este nuevo hábito y no me arrepiento de hacerlo, es más, deberíais probarlo, estás mucho más centrado en la película y siempre cuando termina comento un poco qué me ha parecido con amigos y se la recomiendo o no, porque sí, tengo amigos aunque vaya solo al cine.
Por cierto, había pensado empezar a usar este blog (no todas las entradas) para recomendar o no películas, discos, canciones, series, libros... lo que vaya probando o viendo o escuchando o lo que sea en mi vida cotidiana y así ayudar un poco a la gente que busca una opinión para decidirse, una especie de mis favoritos y mis no favoritos.
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