martes, 9 de febrero de 2016

- ¿Cómo estás? + Bien, gracias

Es lo que se suele contestar cuando te preguntan cómo estás ¿no?... ¿Por qué? ¿Por qué tenemos que decir que estamos bien cuando en realidad no lo estamos? ¿Por qué no podemos decir "no estoy en mi mejor momento" de forma sutil pero diciendo en realidad "necesito un cambio en mi vida"?

Este es un poco mi caso, el que he expuesto anteriormente, paso por un momento en el que estoy muy desmotivado con varios aspectos de mi vida, veamos, por dónde empiezo...

No estoy a gusto con que a mis 23 años no pueda mantenerme económicamente con lo que empezó siendo un hobbie y poco a poco se fue convirtiendo en mi estilo de vida pero no es sólo una cuestión económica... He dejado de sentirme a gusto con lo que en su día me conquistó y poco a poco ha ido dejando de hacerme la ilusión que me hacía antes, que con esto no digo que se hayan ido todas las ganas pero sí que, de estar en un 100% ha pasado a estar en un 15%, una desmotivación que hace que se me quiten las ganas de seguir luchando por ello, de buscar un trabajo más estable, de tener un poco de orden en mi vida...
No me siento lo suficientemente cómodo bailando ni pienso que sea lo suficientemente bueno para dedicarme a ello y no es falsa modestia como se podría pensar, simplemente es poca confianza en uno mismo, sentir que has llegado a tu límite y que ese límite no es suficiente para lo que te piden.
Tampoco me gusta el ambiente que se suele respirar en el mundo del baile (sí, estoy hablando del baile) de egoísmo, de competitividad, de la necesidad de pisar a tu compañero para poder crecer tú en solitario (ojo, que con esto no estoy hablando ni de compañeros míos ni experiencias propias por lo menos que yo me haya dado cuenta), por suerte con los compañeros que me he encontrado dentro del mismo grupo no se ha dado el caso pero sí de agentes externos hacia el grupo completo y ya cansa.
Se me quitan las ganas de bailar de forma "semiprofesional" como estaba haciendo hasta ahora, de luchar por ser "profesional" porque no sé si primero, sería capaz de ello, y segundo si me merecería la pena.
También quiero dejar claro que esta desmotivación no viene dada por nadie cercano a mí que haya podido desmotivarme, es una actitud totalmente personal conmigo mismo.

Y os preguntaréis ¿por qué decides escribir esto justo ahora? Pues bien, este post viene rondando mi cabeza hace un par de meses más o menos y hoy ha sido el punto álgido de esta situación.
¿Sabéis cuál es ese momento en el que no tienes ganas de hacer absolutamente NADA? Eso me ha pasado hoy, ha sido despertarme y después de desayunar no tenía ganas de hacer absolutamente nada, un bajón a nivel de que no quería ni hablar con nadie, he llegado a quitar las notificaciones de WhatsApp para no leer los mensajes que me llegaban porque no tenía ganas ni de hablar con nadie.

En el caso de que dejara el mundo del baile "semiprofesional" no creo que lo dejara como hobbie siempre y cuando tuviera un trabajo en el cual pudiera compaginar horarios y situación económica.

Ahora mismo lo que más miedo me da es que esta desmotivación se extienda a más aspectos de mi vida como justo me ha pasado hoy, también creo que esto viene dado por la desesperación de echar currículums y currículums y que no te llamen en ningún sitio, de que te pidan experiencia mínima de un año para trabajar en una tienda de ropa por ejemplo... estas empresas cierran el mundo laboral a la gente que nos queremos incorporar por primera vez porque así no podremos obtener nuestro primer trabajo en el sector nunca.

Si has llegado hasta aquí gracias por soportar mi chaparrón, esto ha sido más bien un post de desahogo, necesitaba expresar todo el cambio por el que estoy pasando.

Por último, ya que escribo esto: si tienes algún puesto de trabajo para mí estaré encantado de contestar y de ponernos en contacto.

Como siempre os dejo mis redes sociales: Twitter, Facebook, Instagram y YouTube donde podéis seguirme más allá de este blog.